Cuando navegas, ya sea por placer o como parte de la formación de Aula Tomás Ruiz, preparar una mochila de emergencia a bordo es una medida esencial. Este artículo está pensado para ayudarte a aprender a navegar de forma más segura. A continuación, te explico qué elementos incluir, cómo organizarlos y por qué son importantes.
¿Por qué es fundamental tener una mochila de emergencia a bordo?
La mochila de emergencia (también denominada “grab bag” o “ditch bag”) es aquel equipo que debes tener listo para agarrar y llevar en caso de abandonar la embarcación o en una situación crítica. Según expertos, “cuando sólo tienes unos segundos para abandonar la nave, este kit se convierte en tu salvavidas”.
Además, tener este equipo bien preparado te permite:
- Aumentar tus probabilidades de rescate al tener los elementos de señalización adecuados.
- Mitigar riesgos mientras esperas ayuda (por frío, lesiones, exposición al agua, etc.).
- Sentirte más tranquilo y disfrutar la navegación sabiendo que estás preparado.
Elementos clave para tu mochila de emergencia a bordo
| Categoría | Elementos recomendados | ¿Por qué? |
|---|---|---|
| Señalización y comunicación | Flares, espejo de señales, linterna impermeable, silbato, bocina, EPIRB/PLB, radio VHF portátil. | Para alertar a otros barcos o servicios de rescate y facilitar la localización. |
| Flotabilidad y supervivencia básica | Chalecos salvavidas, pañuelos térmicos, manta de supervivencia, cuerda de rescate, pala o remo, bomba de achique o balde. | Para mantenerte a flote, abrigado y con capacidad de aguantar hasta el rescate. |
| Agua, alimentos y protección contra el entorno | Agua embotellada o bolsas de agua, barritas energéticas, raciones no perecederas, ropa de abrigo impermeable, protector solar. | La deshidratación, el hambre o la exposición al sol/viento pueden agravar cualquier emergencia. |
| Herramientas y navegación | Brújula, cartas náuticas impermeables, linterna, bisturí o cuchillo salvavidas, cinta adhesiva, multiherramienta. | Para orientarte, hacer pequeñas reparaciones y adaptarte al entorno si la situación empeora. |
| Botiquín de primeros auxilios | Vendajes, antisépticos, analgésicos, medicamento contra el mareo, guantes desechables, tijeras, manta térmica. | Las lesiones leves o moderadas deben tratarse en el momento para evitar complicaciones mientras esperas ayuda. |
| Documentos, copias y extras | Pasaporte o DNI, licencia de navegación, dinero en efectivo, gafas de recambio, bolsas impermeables, mapa de la zona, teléfono en funda estanca. | En situaciones de evacuación, disponer de documentos y tener extras mejora la gestión y reduce estrés. |
Qué llevar en tu mochila de emergencia a bordo: desarrollo detallado
1. Preparación de la mochila
Primero, elige una bolsa que sea impermeable, idealmente flotante o con capacidad de flotabilidad residual, de colores visibles (amarillo, naranja o rojo). Esta deberá estar ubicada en un lugar de fácil acceso en la embarcación, y todos los miembros de la tripulación deben saber dónde está.
Además, es importante revisar periódicamente su contenido, reemplazar baterías, verificar que la ropa de abrigo esté en buen estado y que los elementos de señalización no estén caducados.
2. Señalización y comunicación
En una emergencia a bordo, alertar a otros barcos o servicios de rescate puede marcar la diferencia. Asegúrate de incluir:
- Linterna impermeable con pilas de repuesto.
- Flares de día y de noche (cohetes, bengalas, humo) según la normativa de la zona.
- Espejo de señales, silbato o bocina para señalización acústica/óptica.
- EPIRB o PLB (beacons que envían señal de emergencia vía satélite).
- Radio VHF portátil con baterías cargadas para comunicaciones con barcos o guardacostas.
3. Flotabilidad, supervivencia y abrigo
Cuando abandonas la embarcación o quedas atrapado, mantener el calor, la flotabilidad y la visibilidad es primordial. Contempla:
- Chaleco salvavidas para cada persona: debe ajustarse bien y estar siempre listo.
- Ropa de abrigo impermeable, manta térmica o saco de supervivencia para prevenir hipotermia.
- Cuerdas de rescate, baldes o bomba de achique si hay entrada de agua.
- Reflejar luz o color con la bolsa para facilitar localización nocturna o en condiciones adversas.
4. Agua, alimentos y protección frente al entorno
Incluso con rescate rápido, podrías quedar expuesto al sol, viento, frío o humedad. Para esto:
- Lleva al menos 1–2 litros de agua por persona o bolsas compactas deseables.
- Barritas energéticas, frutos secos u otras raciones no perecederas.
- Protector solar, gafas de sol polarizadas y sombrero — la radiación en el mar puede ser intensa.
- En climas fríos, cambia de ropa o capa seca si estás mojado para mantener calor corporal.
5. Herramientas, navegación y reparación
Estar preparado para “lo inesperado” implica llevar herramientas y medios de navegación:
- Brújula sencilla y cartas náuticas impermeables de la zona donde navegas.
- Multiherramienta o cuchillo marino, cinta adhesiva, parches para inflables.
- Balde o bomba de achique para evitar que la embarcación se hunda o para evacuar el agua.
6. Botiquín de primeros auxilios
Las lesiones en alta mar pueden complicarse rápidamente, por lo que un botiquín adecuado es clave:
- Vendajes y antisépticos para cortes, contusiones o quemaduras.
- Guantes desechables, antisépticos, tijeras, manta térmica.
- Medicamentos básicos (analgésicos, anti-mareo, antihistamínicos si eres alérgico).
- Instrucciones básicas de primeros auxilios y saber cómo usarlas.
7. Documentos, extras y elementos personales
No subestimes la importancia de llevar también documentos y algunos extras útiles:
- Pasaporte, DNI, licencia de navegación, póliza de seguro — todos en bolsa impermeable.
- Dinero en efectivo, gafas de repuesto, batería portátil, teléfono en caja estanca.
- Bolsas de basura, protectores solares extra, tarjetas de navegación, lápiz impermeable.

Tips para saber qué llevar en tu mochila de emergencia a bordo
- Haz simulacros o revisiones periódicas: abre la bolsa cada 3–6 meses, revisa estado, caducidad de flares, batería, ropa seca.
- Personaliza según la zona: si navegas en aguas frías, añade guantes térmicos o gorro; en aguas cálidas, más protección solar.
- Haz que todos conozcan su ubicación: tripulación y/o acompañantes deben saber dónde está la mochila sin dudar.
- Coloca la mochila en un lugar accesible: no al fondo del camarote, sino en zona de evacuación rápida — cerca de la escotilla si fuera necesario abandonar barco.
- Marca claramente la mochila: con color llamativo, material reflectante, para que destaque incluso de noche o en condiciones adversas.
- Revisa peso y volumen: debe ser manejable, accesible sin esfuerzo; no sobrecargarla con cosas que luego no tendrás tiempo de tomar en emergencia.
- Entrénate en su uso: saber cómo encender un EPIRB, lanzar un flare, usar la brújula o multiherramienta mejora tu eficacia en situación real.
- No dupliques innecesariamente: si la embarcación ya tiene sistema de radio, flares o EPIRB, la mochila puede enfocarse en lo complementario (agua, abrigo, herramientas).
Cómo esta mochila se integra en tu formación para aprender a navegar
- Refuerza tu competencia en seguridad a bordo: parte esencial de “aprender a navegar” es gestionar emergencias, no solo disfrutar del mar.
- Desarrolla cultura de prevención: conocer qué llevar y por qué reduce riesgos y genera tranquilidad para ti y la tripulación.
- Muestra responsabilidad y profesionalidad: tanto si navegas recreativamente como en formación, indicar que llevas una mochila de emergencia transmite seriedad.
- Conecta con otros conocimientos náuticos: navegación, cartas, comunicación VHF, meteorología — todos se integran cuando sabes qué llevar y cómo actuar.
Tener una mochila de emergencia bien diseñada y equipada es uno de los pilares de una navegación segura. Cuando sabes qué llevar en tu mochila de emergencia a bordo, estás mejor preparado para afrontar lo inesperado y demostrar que realmente estás dispuesto a aprender a navegar con responsabilidad.
Recuerda: revisa tu mochila, adapta su contenido según la zona de navegación y el número de personas a bordo, y asegúrate de que todos en la embarcación sepan dónde está y cómo usarla. Así, podrás navegar con mayor tranquilidad, sabiendo que tienes un plan de respaldo firme.
Preguntas frecuentes sobre qué llevar en tu mochila de emergencia a bordo
Preparar correctamente una mochila de emergencia puede generar muchas dudas, especialmente si estás empezando a aprender a navegar. A continuación, respondemos a algunas de las preguntas más comunes para ayudarte a armar tu kit con mayor seguridad y conocimiento.
¿Cada cuánto tiempo debo revisar el contenido de la mochila de emergencia a bordo?
Es recomendable revisar tu mochila cada 3 a 6 meses. Verifica que los flares, baterías, alimentos y medicamentos no estén caducados y que todo esté en buen estado. Además, es importante comprobar que los dispositivos electrónicos como el EPIRB o la radio VHF estén cargados o con baterías nuevas.
¿Puedo usar una mochila normal o necesita ser un modelo especial?
Idealmente, la mochila debe ser impermeable, flotante y de color llamativo. Aunque una mochila convencional podría servir como solución provisional, lo más recomendable es usar una bolsa estanca o de uso náutico, ya que está diseñada específicamente para condiciones de emergencia en el mar.
¿Qué llevar en tu mochila de emergencia a bordo si navegas en aguas frías?
En zonas frías debes incluir ropa térmica extra, guantes impermeables, gorro, manta de supervivencia gruesa y, si es posible, una bolsa bivvy o saco térmico. El riesgo de hipotermia es mayor, por lo que protegerse del frío debe ser una prioridad en tu equipo.





